martes, 4 de agosto de 2009

Mobiliario urbano (ejem, artístico)

Investigando un poco sobre el asunto de la plaza con las banderas, he encontrado que es arte. Sí, Arte, de ese que se escribe con mayúsculas, que cuesta una pasta y no se puede discutir porque el ciudadano es un patán que no entiende nada. Así nos venden el Arte, así nos explican que el gasto no ha sido en vano, sino que embellece la ciudad.
Pues yo sigo en mis trece:
una cosa es una escultura y otra un incordio.

El artista encargado de la obra es Daniel Buren, quie
n ha intervenido en varias ciudades europeas, y muchas veces en el espacio público. Pero las otras veces, ha tenido mucho más acierto. Quizá no ha entendido la ciudad, o no ha entendido el lugar, o se está haciendo viejo. El caso es que está recibiendo muchas críticas, y no sólo del ciudadano inculto y sin derecho a opinar como nos quieren hacer creer.
La idea es la de unir una parte
hundida de la ciudad con la parte más alta, haciendo un gesto simbólico con las banderas. Yo creo que así no se une nada. Además, la obra no tiene nada de poético, nada que te inspire, te haga pensar. Soy eminentemente práctica y a verces me cuesta un poco ver intervenciones en lugares públicos donde la gente pasea, se sienta, busca la sombra, el abrigo de la lluvia o simplemente juega con un balón, en las que dicha intervención no tiene nada que ver.

Gracias al blog de Remedios por ejemplo, empiezo a ver con otros ojos el arte. Quizá porque ella nos explica un poco cada obra, de dónde viene, a dónde va o qué le encuentra ella de poético. Pero en este caso, una vez encontrada la explicación, me cuesta un poco tragármela. Id a ver la página de Daniel Buren y decidme si no tiene obras más conseguidas que ésta. Agradecería algún comentario.


E id preparándoos que la semana que viene vengo con otra entrega artística incomprensible que han hecho para rellenar el hueco que dejaron los conejos naranjas.

4 comentarios:

Tomás Díaz Zamudio dijo...

Hola Cris Braschi, pues la obra de Daniel Buren en el Palais Royal de Paris no convenció y sigue sin convencer al público en general, es incompredida e ignorada.
Es un lugar por el que pasaba casi semanalmente una o dos veces, y lo que sí te puedo decir es que se convertía en un lugar acotado, tranquilo donde familias con niños pequeños iban a jugar porque se sentían muy seguros frente al caos y ruido del exterior del palais; los niños saltaban en los fustes de columnas más bajos o las madres se sentaban en ellos....pero...realmente fue necesatio ese gasto tremendo de dinero? quizas el espacio funionaría igual sin la obra de arte pues su condición de patio es lo que le dá la fuerza, aunque había que interntar algo que a mi jucio no resulto, pero ahí queda para la posteridad.
Un besito

Meri dijo...

Hola, justo ayer pasé por la plaza y me acordé de tu blog, que leo desde hace poco. No tengo ni idea de arte pero no apetece nada quedarse ahí, es más, parece algo comercial, como los banderines de los concesionarios de coches americanos... como tu próxima entrega en el espacio dejado por los conejos naranjas siga el mismo estilo creo que voy a llorar...

lopillas dijo...

Hola Cristina.
A mí también me parece una intervención desacertada, la verdad. Como tu dices un estorbo en medio de la plaza. Y es una pena porque este hombre tiene muy buenas cosas, los juegos de luces con efecto vidriera me encantan por ejemplo. Fíjate que incluso alguna otra intervención con banderines no le ha quedado mal, como la del arco iris.
Pero aquí se le fue el baifo que decimos por mi tierra. ¿Y tienes que hacer una acción sobre mobiliario urbano en esa plaza me pareció entender? ajajjaja Buen reto!
Siempre es un placer ver las cosas bellas que mostrais por estos lares.
Un saludo

espacioapropiado dijo...

Gracias por los comentarios!
La intervención es cerca de la Escuela de Bellas, en el Boulevard de Midi. No sé si voy a poder llevar los muebles hasta allí porque es en subida y los alumnos del taller tienen 13 años...
Pero alguna intervención tengo que hacer de todas formas!
La ex-plaza de los conejos naranjas...es para llorar. T lo digo ya...