viernes, 25 de junio de 2010

Espacios peatonales, Turín


Poco después de Nueva York y Costa Rica, estuve en Turín, la ciudad de mi familia. La verdad es que ultimamente no he parado, por eso tengo tanto retraso con los artículos.

El fin de semana que estuve coincidía con la fiesta del Medio Ambiente. No sé si por eso o simplemente porque hacía buen tiempo, pero vi mucha gente en bicicleta y por los alrededores del río Po. Lo primero que visité fue la zona de "La Crocetta". Me sorprendió ver algunas zonas de juego para niños entre tanto bloque de viviendas. El aspecto era bastante más triste que los playgrounds de Nueva York, pero el hecho de que no hubiera coches hacía que los juegos se extendieran sobre el asfalto, dándole a la zona un carácter más improvisado.

Luego pasé por la Universidad, con grandes zonas verdes y grafitis cuidados. Pero pasé rápido porque una universidad en domingo (sin gente) no tiene gracia...

Durante el paseo vi varios tipos de aceras: de piedra, de asfalto (como en Nueva York) y hasta de hierba.

Acercándome al río Po, pude ver la actividad de un domingo soleado, pero además, por la fiesta del Medio Ambiente, había regatas de canoa. Los bordes del río estaban llenos de casetas, "murazzi" se llaman, que eran en origen casetas para el aprovisionamiento de mercancías gracias al río, y hace 10 años se transformaron para acoger al público torinés y turistas. Ahora la gente local se pregunta si no se está perdiendo un poco el carácter acogedor de la zona, inspirada en la remodelación del Sena en Paris, en favor del turismo.

Entrando al centro por la plaza de Vittorio Veneto, la más importante, me llamó la atención en gran vacío central de la plaza y lo llenos que estaban los soportales de gente paseando y aprovechando del mercadillo de antigüedades. Estas son las cosas que analizaba Jan Gehl en su libro "la humanización del espacio" (Life between buildings): cómo la gente se apropia el espaco urbano, y en especial, cómo prefiere situarse en los bordes de plazas para poder orbservar al que pasa, en lugar de en el centro y ser observado. Claro que en esta plaza la cosa cambia por la noche y durante eventos públicos, ¡se llena a rebosar!

Otra de las plazas que he visitado es la Valdo Fusi, la plaza de la discordia. El diseño de esta plaza salió a concurso, se discutió con los habitantes y salió ganador el proyecto de Topotek. Pero el que se realizó fue el de Buro Kiefer, el que menos gustó. ¡Toma imparcialidad! ¿Por qué acabo siempre hablando de plazas en discordia? será que el espacio público la genera, habrá que enfrentarse a ello. (imagen real izquierda, proyecto de Topotek a la derecha)

Hay una asociación que se creó al poco de inaurgurar la remodelación en 2005, para protestar por el proyecto y el proceso de selección, e intentar proponer algo nuevo. Está en italiano y en inglés, pero podeis mirar un poco de que va el tema. Hay otros medios que explican los diferentes proyectos para la plaza, como la página de alternativas de Stalker. En otros, hay hasta un skatepark.

Para terminar, os dejo con varias fotos de gente en bicicleta. Me gustaría pensar que no sólo pasa esto los domingos de medio ambiente...

jueves, 10 de junio de 2010

Tráfico reciclado, New York

Para seguir con las vivencias americanas, también me ha sorprendido en Nueva York el tráfico no tan caótico como uno se puede imaginar.

Como dije en el post anterior sobre NYC, la diferencia entre las avenidas Norte-Sur y las streets Este-Oeste es clara. Las streets son más tranquilas, verdes y estrechas. En el caso del tráfico también se nota esa diferencia. Por un lado, están las aceras anchas y arboladas y por otro, la cantidad de tráfico, quizá reducida y evolucionando hacia el tráfico lento (bicicletas).

De hecho, el tráfico ciclista está mejorando mucho, principalmente en Manhattan, con carriles bici, información, y páginas de ayuda en internet. Jan Gehl ya lo dijo en la conferencia en la que estuve hace unos meses. Este plano con ayudas para ciclistas se encuentra en todos los puestos donde hay bicis de alquiler, el mismo sistema que Villo en Bruselas o Vélib' en Paris.

Además de las calles, los carriles bici y las zonas peatonales, las aceras están muy bien ejecutadas...aunque no todo el mundo esté de acuerdo con la teoría de que las aceras de asfalto son mejores (ejecución rápida, uniformidad, planeidad...). Pero lo importante es que al ser anchas, el peatón en ellas se siente tranquilo frente a un tráfico eminentemente de "camiones" ya sean los de la basura (que parecen tanques), los de carga y descarga y los propios coches, que muchos son 4x4.

Pero lo dicho, a pesar de los "camiones", cruzar la calle resulta fácil: todas las calles son de sentido único, el peatón sabe siempre de dónde pueden venir los coches y cruza tranquilo. Para el ciclista, la información no falta.
Lejos de todo este ajetreo, aunque ordenado, hallamos un oasis que planea sobre nuestras cabezas: la High Line. Este oasis es en realidad un parque creado sobre una antigua vía de tren que servía para el trasporte de mercancías hasta Chelsea y Meatpacking district, la zona de empresas carniceras. Os hablé de este parque en el artículo que escribí para Esta es una plaza enumerando ejemplos de buena ejecución y lucha vecinal.

Qué más puedo decir de este parque que no se haya dicho ya...Así en breve os diré que fueron los vecinos de la zona los que lucharon durante 7 años para que se recuperaran las vías (convertidas por entonces en un gran solar con hierbajos) en lugar de desmontarlas, para hacer un lugar de interés público. Una gran visión, un gran ejemplo y un parque muy interesante.

Todavía no está terminado, se inauguró en Junio de 2009, pero sólo la primera parte. Hace unas semanas, casi el cumpleaños del primer trozo, se concedió el permiso para recuperar el siguiente trozo. Tendré que volver para ver el resto...

miércoles, 2 de junio de 2010

La humanización del gigante, Nueva York

El mes de mayo no he parado. Tenía que ir a Costa Rica y dije, pues hago escala en Nueva York, asi que me bajo! pero con problemas técnicos y cancelaciones varias, el periplo ha sido más largo y complicado: de ahí las semanas que me he tomado para recuperarme y coger fuerzas para describir todas las experiencias.

He divido los artículos por temas, que intentaré hilar y reagrupar. Este primer post es para contaros lo que más me ha llamado la atención de Nueva York: que el espacio urbano es muy humano!

Las avenidas que van Norte-Sur tienen grandes dimensiones, pero en cuanto cruzas una street, que van Este-Oeste, el skyline se reduce y la calle se llena de árboles. Claro que esto no pasa en todo Manhattan, pero en gran parte. Todos los “village” son así: East Village, Lower East side, Greenwich village, los barrios inmigrantes (China, Italia...)...

Yo iba en busca de los jardines de los Green Guerillas, en el Lower East side, que os conté cuando hablé de los Jardines compartidos de París y en el artículo que escribí en Esta es una plaza. Pero me encontré con toda una red de parques, jardines y zonas de juegos para niños que ¡no me podía creer que estuviera en medio de la península más densa (del mundo?)!

Lo mejor de todo, es que todos estos espacios están gestionados por el Ayuntamiento, pero cuidados por vecinos. La asociación que lo gestiona es Green Thumb, pulgar verde, cuya homóloga en Paris es Mano Verde. Una de las frases que más se lee en la web americana es la de reforzar las comunidades locales. Que los vecinos se conozcan, compartan, cuiden (y vigilen, que no hay que olvidar que son americanos) el espacio público. Son 20.000 personas organizadas en una web, y sus derivadas. Ya quisiéramos para Esta es una plaza...

Nueva York parecía una ciudad europea. Casas bajas (máximo 8 pisos, pero allí parece poco) calles anchas (que reducen más el tamaño de los edificios) árboles en toda la calle, y muchos rincones donde sentarse. Vamos que Nueva York no es para vivir "de paso". Y no me refiero a los inmigrantes que se quedan, sino a la cantidad de oportunidades para relajarse.

Y aunque haya dicho que los parques y la zona "humana" están principalmente en los village, la zona de más rascacielos no se queda corta de iniciativas. Una parte de Broadway es peatonal, entre la calle 42 y la 47 y precisamente lo que no falta es mobiliario urbano. Vale que los coches pueden seguir cruzando Este-Oeste la avenida, pero el ambiente incita bastante a tomarse un respiro, es un espacio-apropiado. Las sillas y mesas están para apropiárselas, no están fijas al suelo. Alguno dirá que en España no durarían dos días, pero con tanta policía dirigiendo el tráfico no sé yo. Y con la mentalidad que tienen.

Se transmite mucho el mensaje sobre apropiarse el espaco público. Cuidarlo, no ensuciar, e implicarse para su gestión. Las sillas de Broadway son así para que los usuarios se agrupen como quieran. Macetas, escalones, escaleras, aceras, bordillos y demás mobiliario urbano invitan a sentarse. Ya quisiera la plaza de Sol.

Sólo una foto curiosa: las famosas bocas de incendio no siguen la misma corriente: